Los Browns firmaron al mariscal de campo Deshaun Watson con un contrato récord de cinco años y $230 millones totalmente garantizado hace un año. El lunes, el equipo reestructuró ese contrato, insinuando sus planes para la agencia libre.
El movimiento crea casi $36 millones en espacio bajo el tope salarial solo unas horas antes de que comience el período de manipulación y demuestra que Cleveland se está preparando para tener una temporada baja agresiva una vez más.
Los Browns ya han sido vinculados a varios agentes libres veteranos que buscan recuperarse después de terminar 7-10 y perderse los playoffs en 2022. El profundo de los Bengals, Jessie Bates, y el tackle defensivo de los Eagles, Javon Hargrave, son solo dos jugadores de impacto que han mencionado. Con el contrato reestructurado de Watson, Cleveland debería poder firmar a quien quiera.
Watson no tuvo la remontada que imaginó en 2022, lanzando para 1,102 yardas, siete touchdowns y cinco intercepciones. Tal vez con algunas piezas más a su alrededor, podrá volver a jugar la calidad de fútbol americano que tuvo en 2020 cuando lideró la NFL en yardas aéreas (4,823).
La temporada 2023 será decisiva para el futuro del equipo. El tope salarial de Watson para la próxima temporada es de poco más de $ 19 millones, pero será de casi $ 64 millones en los años siguientes.
Los Browns le dieron a Watson su voto de confianza y ahora es el momento de que lo haga. Si Cleveland no puede encontrar su fórmula ganadora ahora, será aún más difícil en los próximos años.
Ahora es el momento de que los Browns realicen las actualizaciones necesarias en la plantilla.